La madrugada de hoy no fue la mejor para los habitantes de un sector del tradicional barrio Victoria en Tuluá. Sobre la carrera 35 con calle 28A se registró un lamentable hecho que terminó en una triste tragedia familiar.
Un hombre, que al parecer sufría de trastornos mentales, llegó a la vivienda donde residían sus padres y hermanos y acuchilló a su señora madre y en el hecho resultaron lesionados su padre y también un hermano.
Pero el horror, que ya había sido detectado por los vecinos, pues los gritos desesperados despertaron a quienes a esa hora de la mañana dormían. Eran alrededor de las cinco y como es apenas lógico, la Policía del cuadrante hizo presencia y una vez el hombre cometió el ataque a su progenitora, al parecer habría salido a la calle con el cuchillo en la mano, ensangrentado y delante de los uniformados empezó a propinarse cuchilladas en el estómago.
Gravemente herido fue trasladado hasta un centro asistencial donde falleció.
Sin embargo, en su residencia y en las de los vecinos, el asombro y la consternación fueron los protagonistas. No era para menos. De inmediato decenas de curiosos se aglomeraron cerca a la escena del crimen, pues no podían dar crédito a lo que acababa de ocurrir.
“Escuchamos los gritos y luego llegó la Policía, fue horrible, una tragedia. Doña Soraida era una muy buena mujer, muy trabajadora, es una pena que haya sucedido esto”, señaló una vecina.
“Ella era muy conocida, no sólo aquí en el barrio, sino en todo Tuluá y también en otras partes, pues de todo lado venían a comprarle los faroles en diciembre ella no daba a vasto, si uno quería comprar tenía que encargárselos con mucha anticipación”, dijo otro de los residentes en el sector.
Asimismo, doña Soraida también fabricaba escobas y trapeadores dijeron algunas personas que la conocían. Con todos esos productos ella levantó a su familia, a base de esfuerzo y mucho trabajo.
Un hombre, que al parecer sufría de trastornos mentales, llegó a la vivienda donde residían sus padres y hermanos y acuchilló a su señora madre y en el hecho resultaron lesionados su padre y también un hermano.
Pero el horror, que ya había sido detectado por los vecinos, pues los gritos desesperados despertaron a quienes a esa hora de la mañana dormían. Eran alrededor de las cinco y como es apenas lógico, la Policía del cuadrante hizo presencia y una vez el hombre cometió el ataque a su progenitora, al parecer habría salido a la calle con el cuchillo en la mano, ensangrentado y delante de los uniformados empezó a propinarse cuchilladas en el estómago.
Gravemente herido fue trasladado hasta un centro asistencial donde falleció.
Sin embargo, en su residencia y en las de los vecinos, el asombro y la consternación fueron los protagonistas. No era para menos. De inmediato decenas de curiosos se aglomeraron cerca a la escena del crimen, pues no podían dar crédito a lo que acababa de ocurrir.
“Escuchamos los gritos y luego llegó la Policía, fue horrible, una tragedia. Doña Soraida era una muy buena mujer, muy trabajadora, es una pena que haya sucedido esto”, señaló una vecina.
“Ella era muy conocida, no sólo aquí en el barrio, sino en todo Tuluá y también en otras partes, pues de todo lado venían a comprarle los faroles en diciembre ella no daba a vasto, si uno quería comprar tenía que encargárselos con mucha anticipación”, dijo otro de los residentes en el sector.
Asimismo, doña Soraida también fabricaba escobas y trapeadores dijeron algunas personas que la conocían. Con todos esos productos ella levantó a su familia, a base de esfuerzo y mucho trabajo.
